Dónde ahorrar en una reforma

Cómo se puede ahorrar en una reforma de vivienda o local y cómo hacerlo sin perder calidad ni funcionalidad.

Cuando nos enfrentamos a una reforma total o parcial en vivienda o bajo comercial, debemos definir un proyecto realista y asumible en tiempo y coste. Y el primer paso es identificar los elementos imprescindibles, que debe incluir la reforma si o si, y aquellos superfluos que solo entrarían si el presupuesto lo permite.

Cuando nos enfrentamos la primera vez a una reforma de un baño, una cocina o de un espacio completo la tendencia es incluir todos los elementos que nos encantan, muchas veces recogidos de revistas y casas que poco tienen que ver con el espacio real con el que contamos. Ser consciente del uso que vamos a darle a cada espacio, de la calidad mínima y más adecuada de los materiales, y ver diferentes opciones con diferentes precios, nos permite colocarnos en una posición más realista y acorde con nuestro estilo de vida y nuestro presupuesto.

Veamos algunas ideas para que nuestra reforma se convierta en una experiencia agradable con un gran resultado, en vez de una pesadilla interminable.

Consejos para ahorrar en una reforma

Una misma reforma con presupuestos diferentes puede conseguir resultados muy similares si nos centramos en algunos aspectos clave, como:

1. Conservar elementos

Conserva todos los elementos (mobiliario, grifería, suelos, …) que valgan la pena y que no afecten negativamente al resultado de la reforma.

No se trata de usar todo lo que está en buen estado, sino aquello que encaje con el estilo y los acabados que tenemos en mente.

Así, si hemos cambiado recientemente un espejo o una grifería de baño, podemos plantear la reforma incluyéndolos en el diseño final.  Además, también puedes reutilizar algunos materiales dándoles una mano de pintura (muebles de baño, estanterías o puertas), diseñando algún elemento decorativo (con azulejos o baldosas …),etc.

2. Ajústate a la estructura de la casa o local

Si planteas una reforma económica, no incluyas cambios estructurales como quitar paredes, abrir espacios, cambiar ubicación de sanitarios o fontanería, etc.

Este tipo de reformas no solo encarecen la obra, sino que suelen ir acompañadas de nuevas necesidades (vigas o pilares estructurales, cambios de tuberías, reubicación de aire acondicionado,…) no incluidas en el presupuesto original.

Además, estos cambios pueden exigir permisos a la comunidad de vecinos (cierres de terrazas, cambios shunt de ventilación, cambio de ventanas,…).

3. Prioriza la calidad y la salud frente al diseño

Establece prioridades en la obra, especialmente aquello que afecte al control de humedades, aislamiento térmico y/o acústico, el saneamiento, el cambio de ventanas para ahorro energético y la actualización de las instalaciones para evitar averías o problemas de funcionamiento.

Elegir un buen aislante permitirá tanto ahorrar en tu factura de la luz como aislar ruidos exteriores o de vecinos, y aumentará el confort de la vivienda o local.

Aunque en estos materiales hay unos estándares mínimos que regula la ley, es aconsejable invertir un poco más en su mejora.

4. Planifica la obra y la retirada de materiales

Aunque en España somos famosos por nuestra improvisación, en una reforma supone costes extras que debes evitar a toda costa. Días sin poder avanzar por falta de permisos, materiales que no llegan o están defectuosos, oficios que no se coordinan en fechas, poco realismo en el tiempo de cada trabajo, etc.

Organizar todo el trabajo desde la solicitud de permisos (Ayuntamiento, Comunidad de Vecinos, etc. ), compra y entrega de materiales, almacenamiento y recogida de escombros, hasta las fechas de entrada de cada oficio, marcará una importante  diferencia presupuestaria. Así que, dedícale tiempo.

Si contratas la obra, es frecuente incluir en el contrato una indemnización por retraso. 

5. Elige alternativas decorativas

Buscar alternativas con pintura o papel de pared, disminuye el precio y también el tiempo de la reforma.

Actualmente es cada vez más la gente que busca alternativas para reformar sin obra o con una obra mínima, consiguiendo un excelente resultado en pocos días.

Por ejemplo, prueba a pintar de blanco ese azulejo rosa que tienes en el baño, deja el suelo y coloca encima suelo laminado, pinta las paredes de la cocina que no forman parte del salpicadero, pon papel en algunas paredes del baño, pinta las puertas de la casa o los muebles de cocina, etc.

6. Busca materiales en oferta o fuera de stock

¿Te encanta un azulejo hidráulico de diseño, un plato de ducha de marca o un suelo de madera natural? Puede que los precios te impidan incluirlo en la reforma. Sin embargo, las tiendas de materiales siempre cuentan con ofertas puntuales y productos fuera de stock, algunos de grandes marcas, que quizás te sirvan para estancias con pocos metros.

Eso si, ten en cuenta que no habrá más metros disponibles, por lo que tendrás que adaptar tu reforma al material disponible. Utilízalo solo o combínalo para un resultado espectacular.

En Suministros HSF contamos con un departamento técnico que te ayuda a elegir todos los materiales para tu reforma. Cuéntanos la obra que quieres realizar y te ayudaremos en todo el proceso. Contáctanos por teléfono +34 968 660 316 , formulario o si tienes claro lo que necesitas, utiliza presupuestador online  para recibir un presupuesto a medida.